La masturbación puede ser la mejor manera de
aprender lo que más te excita. La religión metió en la cabeza de la gente el no
disfrutar del sexo. Para ellas el sexo era única y exclusivamente para la
perpetuación de la especie.
Este articulo de masturbación es para las
mujeres, aunque no todas vosotras os estimuláis o excitáis igual todas tenéis
una vulva y un clítoris. Recuerda, que no hay una manera incorrecta de
masturbarse; cada uno es diferente. A continuación encontrará algunos consejos,
tome lo que le funcione, y deje el resto. Con la masturbación encontraras lo
que más te excite.
Consejos
Mastúrbate cuando estés relajada y tengas
tiempo para disfrutarla. Relájete lo más que puedas. Toma un baño caliente o
tome una copa de vino. Asegúrese de un lugar intimo y privado: apagar el
teléfono, el móvil, cerrar la puerta. Busca la posición más cómodo. La mayoría
de las mujeres comienzan a tumbadas sobre su espalda, aunque puedes probar con
las piernas flexionadas y separadas, con los pies en el suelo, etc. Desnúdate
entera o quédate a medio vestir. Es tu elección.
Explora todas las partes de tu cuerpo. Pasa
tus manos a lo largo de todo tu cuerpo, descubrirás que hay áreas mas sensibles
al tacto que otras. Si eres capaz de hacerlo, y nunca lo has hecho antes, es
posible que quieras mirar tus genitales en un espejo. Debido a que muchas
mujeres se envían mensajes negativos sobre sus cuerpos, y en particular a sus
genitales, ser capaz de ver mientras se toca puede ser muy potente y
sorprendente. Encuentra y toca tus labios internos y externos, tu clítoris, la
vagina y el perineo.
Usa uno o dos dedos, moviéndolos rítmicamente
sobre las diferentes partes de la vulva, prestando especial atención a su
clítoris. Experimenta con diferentes tipos de presión, velocidad y movimientos. Trata de colocar un
dedo a cada lado del clítoris y acaricia hacia arriba y abajo, o coloca dos dedos
en la capucha del clítoris y frota con un movimiento circular.
Experimenta. Prueba diferentes tipos de
contacto: movimiento, caricias, pellizcos, o tira suavemente de tus genitales.
Trata de usar uno o varios dedos, la palma de la mano, o incluso tus nudillos.
Presta atención a cómo su cuerpo está
respondiendo a la excitación. Así podrá descubrir que es lo que mas le gusta.
No te olvides de respirar, de manera
diferente. Muchos personas tienen una respiración para cuando nos emocionamos.
Se consciente de tu respiración y juegue con la ella durante la excitación.
Trate de respirar profundamente sin contenerla. Esto puede ayudar a liberar la
energía sexual, en lugar de luchar contra ella.
Ponte en movimiento, aunque sea un poco.
Además de a menudo contener la respiración, muchas mujeres se ponen tensas y no
se mueven mucho cuando se masturban. Esto puede funcionar para ti muy bien,
pero si no has explorado el movimiento, vale la pena intentarlo. Moverse
mientras está excitándose puede cambiar la forma de experimentar el placer en tu
cuerpo. Para algunas mujeres esto significa mover sus pelvis. Para otras,
significa mover sus piernas o el torso de lado a lado. Encuentra el movimiento
que mejor te funciona.
Si tu mano se cansa, date un descanso, puedes
cambiar de mano, o probar un vibrador.
Al comenzar el orgasmo, continúa con la
estimulación. Baja la intensidad en la estimulación durante los primeros
momentos que son muy sensibles, pero ponte de nuevo en marcha para disfrutar de
esas pequeñas réplicas placenteras. Tu primer orgasmo puede sentirse como un una
explosión, pero cuanto más se practique, más variedad de sensaciones
placenteras ira experimentando.
Fantasear y la masturbación. La fantasía
sexual puede ser un arma de doble filo cuando se trata de la masturbación. Si
tiene problemas para conseguir en el humor o subir la libido, una fantasía caliente
puede ser el detonante para alcanzarlo.
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